A la salida todos huyeron en diferentes direcciones sin siquiera saludarse, pero no dijo nada.
sábado, 20 de mayo de 2023
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Por alguna razón que sólo el dueño de blogger tal vez conozca, todos los textos y comentarios que publiqué desde el inicio de Proyecto Azúcar hasta principios del 2011 hoy figuran como si los hubiera realizado un Anónimo. Sepan pues, dos cosas, Uno: todos los textos publicados son de mi autoría. Dos: los mensajes firmados como J., son respuestas a los comentarios de quienes me leyeron. Los otros comentarios anónimos seguirán de esa manera. Gracias
Si no dice "esta foto es mía", es porque la saqué de la red. No son de mi autoría, ni de ningún conocido mío, no las utilizo con fines de lucro sino para ilustrar para el contenido de mis textos. Y si alguien se ofende o se molesta, problema de ese alguien.
Gracias.
José A. García
7 comentarios:
Tal vez sea porque los saludos estén sobrevaluados.
Saludos,
J.
No era el momento más oportuno para decir algo, cuando se estaba huyendo.
Saludos.
Al contrario, son saludos de "no me importa un pito". Saludos.
Su impasibilidad pasmosa.
Me enoja saludar al vacío.
Está bien.
Eso de quedarse hablando media hora antes de despedirse finalmente, exacerba a cualquiera que tenga algo más importante que hacer
Chau
José: O tal vez sea que ya nada tiene valor.
Demiurgo: Es posible. Pero ¿hay un momento oportuno para decir las cosas?
Guillermo Castillo: Esos saludos suelen ser los peores.
Carlos Augusto: Deja sin palabras a cualquiera, es cierto.
Etienne: Saludas y no tener respuesta es el peor de los sentimientos posibles.
Frodo: ¿Y cuando no se tiene nada más que hacer?
Gracias por sus visitas.
Nos leemos,
J.
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