En uno de los tantos universos probables nos miramos a los ojos para hablar.
sábado, 21 de noviembre de 2020
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- José A. García
- Profesor José A. García. Si usted lo conoce no es culpa nuestra. Ahora también en versión Magister.
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5 comentarios:
Aunque la mayoría de las veces sea de por sí muy incómodo.
Saludos,
J.
A veces, sucede en este, aun en la virtualidad.
Suele pasar en este universo, en algunas circunstancias.
Pues fíjate que a mí me parece incómodo precisamente lo contrario: hablar con alguien que desvíe la mirada o no me mire a los ojos cuando hablo con ella... creo que en las culturas asiáticas lo pasaría un poco mal al principio, pues sé que en algunas evitan precisamente esa actitud por parecerles demasiado atrevida con la intimidad del otro.
EN fin, de todos tus universos probables escogí éste... tengo mis reservas con los demás... el fracaso no es sinónimo de triunfo y odio no decir o que no me digan la verdad... claro, también es verdad que hay que saber decirla, porque hay cada uno/a que te espetan unas cosas que te dejan patidifusa...
Saludos
José: Más que la mayoría, diría que todas las veces lo es.
Demiurgo: En esos casos es imposible negarse. Y son muy pocas esas circunstancias, por suerte para algunos.
Ginebra: Algunas veces desviar la mirada de quien habla permite concentrarse en sus palabras. Es como bajar el volumen de la música en el auto para concentrarse en el camino, no parece tener relación, pero sí la tiene (al menos es lo que creo porque no sé manejar).
Julio David: Y cuando no es así lo señalamos con el dedo, sacamos una foto y lo denunciamos en las redes sociales creyéndonos activistas sociales. Muy cierto.
Gracias por sus comentarios.
Nos leemos,
J.
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