¡Cómo pasa el tiempo, hermano! Y hoy, más de
veinticinco abriles hemos de cantar. Pero no digamos cuántos, para que nos
quede, al menos, una pizca de coquetería.
Como
pasó el tiempo, si de borregos nos volvimos machos reproductores que debían,
por imposición popular, perpetuar la especie. Claro que, para eso, hacen falta
muchas cosas.
Cómo
pasa el tiempo, hermano. Si antes de peinar las canas de la sabiduría, sin
cabello alguno me quedé. Pero nadie dice nada para ser políticamente correcto aun
cuando hace falta insultar al contrincante. El odio nunca es correcto, aunque
posee mucho de político, eso sí.
Cómo
pasa el tiempo, hermano. Que si antes nos cuidábamos de no pescar una gripe,
ahora tememos salir del encierro para no tentar a la suerte. Tanto que coraje y
valentía dejaron de ser palabras de uso común en nuestro vocabulario hace
muchísimo tiempo.
Como
pasa el tiempo, hermano. Que cuando la muerte se presentó a mi puerta, le grité
que fuera a pedirle la pelota a Magoya pero, luego, cuando la identifiqué como
la antigua lejana línea de llegada le grité, recordando viejas bravuconadas de
antaño.
—¡No
me llevarás con vida!
Y
ella, por supuesto, se sonrió.
7 comentarios:
Como pasa el tiempo...
J.
Veinticinco abriles... aún saliendo del cascarón [dicen].
Siempre que veo a un hombre sin cabello, me sale una expresión, es involuntaria "qué hermoso", le digo, y es que me encanta así.
Hablando con un amigo en una ocasión me dijo que las personas de su edad [50] ya estaban jubiladas mentalmente, eso me asustó un poco, el paso del tiempo es inevitable, lo que hace la diferencia es el cómo lo aprovechamos.
Un beso, JOSÉ
[Siempre que vuelvo a tu espacio, recuerdo tu primer visita, noviembre del año pasado y tengo muy presente lo que me comentaste y me hace dudar de la decisión que tengo tomada y vuelvo a quedar indecisa]
Ustedes dos está muy negativos.
Mi colega demiurgo está más sombrío que yo. Y la discipula de Erato suena no muy optimista con eso de la decisión.
Ame: Sea cual sea esa, cualquier decisión merece ser revisada de tiempo en tiempo.
Demiurgo: Y todavía queda mucha sombra por atravesar...
Gracias por las visitas y comentarios.
J.
Hermoso relato...me encantó...me quedo
Muy buen texto, hermano! Abrazo
Mel que, si la pelona me quiere llevar un día de estos, le recordaré que tengo tendencia a diabetes y que el chocolate hershey es mi punto más débil
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