jueves, 1 de mayo de 2014

Horizonte más ‘N’

Esa maldita línea que siempre se mueve, que sólo se está quieta cuando nosotros reposamos, como si conociera nuestra debilidad. Esa maldita línea que se enquista frente a nuestros ojos, como burlándose, riéndose, de nuestros errores, de nuestros defectos, o no.
            O no, no. Sé que lo hace. Por eso continúa allí, siempre en el mismo lugar, a un paso más de distancia cuando caminamos, alejándose a la velocidad del rayo cuando corremos, esforzándose por burlarse de nosotros, de mí, de nosotros, de mí.
            Maldita línea infranqueable, que me condena a ser su eterno perseguidor, para no dejarme descansar nunca, ni siquiera un segundo. Ni siquiera eso.
            Seremos legiones de hombres levantándonos uno detrás de otro, persiguiéndote. Si uno cae, si uno descansa, si uno muere, habrá otros (en número incontable), dispuestos a perseguirte, a acribillarte a miradas, a empujarte con el deseo.
            Sé que puedes huir y que lo harás sin dudarlo. Pero todo tiene un límite, y hasta donde llegue mi poder de hombre amo de la creación y destructor de mundos, sé que te alcanzaré, que llegaré, que serás derrotada, humillada, quebrada en tantas partes como manos se apoderen de ti, hasta hacerte desaparecer.
            Y sólo entonces sabremos qué se esconde más allá de los límites del horizonte y el crepúsculo. Pero sólo entonces.

5 comentarios:

mariarosa dijo...

Vaya tema difícil. ¿Cómo llegar? Es imposible, siempre está metras adelante. Muy buena entrada y muy bien escrita. El mar me despierta tantas preguntas cuando lo miro desde la orilla, al menos me reconforta saber que hay varios locos, que no estoy sola.

mariarosa

censurasigloXXI dijo...

¿qué sentido tiene la metáfora de querer derrotar, humillar o quebrar el horizonte?

¿Porque nunca sabemos bastante por más que andemos y andemos, y nuestro conocimiento tiene límites por más que nos esforcemos?

Ya me cuentas...
O me falta el cafelito de mediodía...

Abrazo.

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Tal vez ese grupo que trata de alcanzar el horizonte se choque con otro grupo, que trata de alcanzar el horizonte en otra direción.

Te dejé un premio en mi blog, colega demiurgo.

Esilleviana dijo...

El horizonte, esa línea inquebrantable que siempre hemos mirado con curiosidad, con intención de investigar, con gran análisis y reconocimiento con la intención de saber más y estar a la altura de los dioses... nunca llegaremos a sobrepasarla.

un abrazo

Giovanna dijo...

Creo que lo que vivimos se parece más a una carrera en postas que a un horizonte todista, ¿no?