martes, 25 de diciembre de 2012

Traductor

Dicen que todo comenzó como una broma. Aunque no saben quién la inició. Ni creo, tampoco, que ese saber sirva de mucho. Porque son pocos los secretos que persisten en todo éste asunto.
El reino era fecundo y próspero en gentes y riquezas, mucho más de lo que puede verse en los viejos recuerdos; oh, sí, mucho más.
Hasta que el misterio llegó de occidente y trastocó los órdenes, modificó lo establecido cambiando cada cosa de su sitio. Lo logró en la forma de un viajero de paso, que no pertenecía ni aquí ni allí, ni a ningún otro lugar.
Hablaba otro idioma, uno en el que las palabras se parecían mucho en su sonido, pero significaban cosas tan diferentes, eso fue lo que nos dijo. O eso fue lo que quisimos creer.
Caminó, el recién llegado, por los caminos del reino, por los pasillos del Palacio, entre los muros de los hogares, dándole nuevos nombres a las cosas. Nombres diferentes pero similares, nombres que quizá significaban otra cosa. Palabras que, pronunciadas con su melodiosa voz, sonaban bellas y brillantes.
Hasta el día en que llegó al salón del trono y mirando al bondadoso amo y señor del reino, nos dijo que, en su lengua, Rey y Bufón, significan exactamente lo mismo.
Las cosas no han vuelto a ser iguales desde ese día.

7 comentarios:

peregrinopurpura dijo...

La subversión empieza por las palabras.

Abrazo!

Esilleviana dijo...

Esta semana escuché una entrevista a Luis Piedrahita presentando su nuevo libro El castellano es un idioma loable, lo hable quien lo hable y trataba sobre las erratas en las traducciones y como no se supervisan.

Te deseo que en el nuevo año 2013 tengas muchos momentos felices y prósperos.

Un fuerte abrazo

José A. García dijo...

Así es Peregrino, las palabras y los nombres son lo primero que se pierden.

Esilleviana: Buscaré ese libro que, supongo, no tendrá aún una edición en Argentina. Pero me parece interesante el tema que plantea.

Saludos

J.

Esilleviana dijo...

cuanto me costaría enviartelo??

Anónimo dijo...

Ja ja ja... genial el desenlace.

serafin p g dijo...

un rey divertido y dispuesto a entretener, no estaría mal.
buen relato
salut José!

José A. García dijo...

Adrianófanes: Gracias!

Serafín: Nos haría falta alguien así, es cierto...

Saludos a tod@s!

J.