lunes, 20 de agosto de 2012

Sólo ellos dos


Se odiaban, se amaban, por igual; como la mayoría de las parejas que conocían. Aún de aquellas que no tenían necesidad de demostrarlo. A veces se odiaban más; otras semanas el amor preponderaba. Pero nunca lo sabían de antemano. Quizás a meses de odios contenidos los seguían meses de violencia mal dirigida hacia objetos o animales.
Otras veces, el amor duraba años.
Una condena, un castigo, una maravilla. El paraíso, el purgatorio ineludible; cualquier otro calificativo también cuadraba bien en tan extraña situación.
No estaban solos en el universo, ni mucho menos. No, nada de eso, simplemente, las cosas, se habían ideo dando de ese modo.
Odiándose unos días.
Amándose otros.
Equilibrando, a veces, la balanza, con un poco de fanatismo.
Y mucha improvisación.

6 comentarios:

Bird dijo...

O sea, ni bueno, ni malo, sino todo lo contrario.

En una de las últimas líneas dice "ideo" supongo que es ido.

José A. García dijo...

Gracias, no me había dado cuenta del error de tipeo. Y eso que lo leí varias veces antes de publicarlo.

Ni bueno ni malo, sólo vida, que le dicen.

Saludos

J.

Anónimo dijo...

Dicen que los opuestos se atraen. Parece ser una verdad irrefutable...

Sole dijo...

Exactamente. Hace meses que vengo queriendo escribir algo así, simplemente no podría ser más cierto ni mejor escrito. Un abrazo y gracias!

Esilleviana dijo...

Éso es un matrimonio bien avenido? :)) o simplemente, amistad.

Un abrazo

Antonio dijo...

La vida tiene mucho de péndulo oscilante... mientras más llevas el péndulo a un lado con más fuerza vuelve al otro salvo que lo ates.
Saludos