viernes, 30 de julio de 2010

Las aventuras intergalácticas de los sobres de ketchup caducos

Capítulo 3 – Sobre el tiempo y otros conceptos

Girando sobre sí mismos, y uno en torno al otro, los ketchups caducos pasaban el tiempo, a veces hablando, a veces preguntando, a veces, simplemente, existiendo.
—¿Cómo podemos medir el tiempo? —preguntó el ketchup caduco en abril, un sobre más lleno de dudas que de aderezo de tomate.
—Depende de para qué quieras medirlo —respondió su compañero de deriva cósmica.
—Para conocerlo.
—¿Para conocerlo necesitas medirlo? —preguntó el ketchup de octubre.
—Si somos la medida de todas las cosas, quiero saber cuántos sobres iguales a mi dura un parpadeo.
—Tú no puedes parpadear, careces de ojos.
—Pero puedo tomarlo como unidad de medida. Parpadeos, suspiros y gemidos; o, también, segundos, minutos y horas.
—Te estás respondiendo a ti mismo. ¿Cómo mides el tiempo? Creando una escala propia —explicó el ketchup caduco en octubre.
—¿Entonces puedo decir que demoro quince parpadeos en girar sobre mí mismo?
—Puedes decirlo, por supuesto, aún cuando sólo tú te entiendas.
—¿Por qué? —preguntó el ketchup caducado en un mes abril.
—Porque, mi querido amigo, así como lo has hecho tú, cualquiera puede crearse su propia unidad de medida. Y nunca se entenderían al hablar.
—¡Pero es necesario medir el tiempo! —gritó el ketchup de abril.
—¿Por qué?
—Para saber otras cosas. Cuánto tardas en nacer, un niño en envejecer, un mundo en morir, nosotros en rotar.
—El tiempo no tiene medidas —explicó el ketchup de octubre—, pero, si te sientes más cómodo, podemos adoptar tu unidad de medida para usarla nosotros.
—¿Y tenía que tomarte nueve suspiros aceptarlo? —preguntó, triunfante el ketchup de abril.

8 comentarios:

Noelia A dijo...

Lo que pasa es que hasta los parpadeos son, en tiempo,relativos a quien parpadea. jaja
Me gustó la idea de ketchups existencialistas meditando sobre la caducidad y teniendola impresa al dorso. Capaz nosotros la tenemos impresa al dorso, y no la vemos, o no la queremos ver, y más bien nos da por imaginarnos un "más allá" inexistente.

TucuMala dijo...

fumadisimo el post!!

tucumala

Unknown dijo...

en tu biblioteca tenés sobrecitos de katchup?

(sería doblemente envidiada, pensalo)

Anónimo dijo...

Leer acerca de sobrecitos de ketchup parlantes, un viernes a estas horas... es bastante perturbador jaja...

...pero interesante. Me mató la reflexión de NoeliaA.

fea dijo...

guauuuuuuu...

Bla dijo...

Cuarenta gemidos es una eternidad..

Juan Carlos Eberhardt dijo...

el ketchup con azucar nunca caduca ,otra ves en carrera ,me alegro mucho
un abrazo grandote!!!

Anónimo dijo...

NoeliA: Todos somos un poco existencialistas aunque no queramos verlo. Por eso le ponemos fecha de caducidad a lo que comemos, a nuestras relaciones, a nuestras vidas y, prácticamente, a todo lo demás.


Psicóloga con problemas: Gracias.

Luz: No lo había pensado, pero podría llevar ala práctica tu idea…

Despe: La literatura, si no perturba, no está haciendo bien las cosas.

Fea: Ídem.

Mitófago: Es verdad, es mucho tiempo.

Juan Carlos: Gracias, es cierto, nunca caduca.

Saludos a Tod@s