Seis horas atrás tenía sed. Cuando
estaba por subir al ómnibus, pensó que podría aguantar hasta llegar, y subió.
Cinco horas y
cincuenta minutos atrás, el tránsito los detuvo en la autopista. Como todavía
tenía algo de saliva con la cual mojarse los labios, no le importó.
Tres horas atrás,
apenas habían avanzado un corto tramo del extenso trayecto.
Dos horas atrás
la expendedora de bebidas, que tenía frente a sus ojos, dejó de funcionar, algo
se atascó en su mecanismo, le dijeron. ¿Por qué no se sirvió un vaso cuando
todavía tenía una oportunidad? Uno pequeño por lo menos.
Una hora atrás
ya sentía la garganta seca, como si tuviera arena en la boca, y la pastosa
saliva apenas se removía entre su lengua y los dientes.
Media hora atrás
un solitario cartel en la ruta le avisó que, por fin, habían avanzado la mitad
del viaje bajo el encapotado cielo de junio. ¡Cuánta sed sentía!
Veinte minutos
atrás reconoció que nunca antes había sentido tanta necesidad de un poco de
agua.
Quince minutos
atrás su deseo por un poco de agua, una gota aunque más no fuera, un poco de
humedad a la que aferrarse, comenzaba a imponerse cada vez con mayor fuerza en
su pensamiento.
Un minuto atrás
las nubes se abrieron dejando caer la lluvia.
Recién. Con
desesperación, horror y, seguramente, un poco de resignación, notó que ninguna ventana
del ómnibus podía abrirse.
Ahora mismo,
sentado con la frente apoyada sobre el vidrio mira la lluvia caer, salpicar el
otro lado del vidrio, divirtiéndose sin más.
5 comentarios:
Sí, sí ya sé que la tabla periódica esta llena de elementos, incluso de elementos artificiales, pero no es mala la idea. Lo harias bien. Dos cosas: muy buen texto, creo que me dio mucha sed.
Voy a agregar el link de tu blog al mio de la Titanomaquia...
Creo que tenemos varias cosas en común...
Un abrazo...
Tal vez pueda juntar agua abriendo la puerta :)
GENIAL...
sed... y más sed de agua, de vida, de todo
Titan: Tal vez si nos dividimos la tabla periódica podría ver de hacer algo... pensalo
Mechi:¿Vos abrirías la puerta de un micro en medio de la ruta, mientras va andando y teniendo en cuenta el posible humor de los choferes? Yo, por las dudas, no.
Enredada: Gracias por el comentario, y si, todos en algún momento tenemos algo de sed... quizá no tanta, pero por algo se empieza.
Agua en un fluir permanente...agua de vida...
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