domingo, 23 de junio de 2013

Las aventuras intergalácticas de los sobres de ketchup caducos

Capítulo 11 – Del Movimiento


Flotando en medio del vacío del cosmos infinito, donde cualquier punto es el centro de una esfera sin igual, los sobres de ketchup caducos continuaban su, por llamarla de algún modo, existencia.
—¿Nos movemos o, acaso, es que el resto de las cosas lo hacen mientras nosotros permanecemos estáticos? —preguntó al vacío, a la inmensidad, aunque más probablemente, a su compañero, el ketchup caducado un abril.
—Ninguna de las dos opciones —fue la respuesta del sobre de aderezo vencido en un octubre pasado.
—Te noto un poco más misterioso que de costumbre. ¿Puedes explicarme tu respuesta? —dijo el aderezo de un olvidado abril.
—Carece de misterio. No hay nada en el universo entero que permanezca estático. Cada diminuta o gigantesca cosa se mueve. El polvo que flota junto a nosotros, nosotros mismos, los planetas, las estrellas y las galaxias. Aunque me condene a la hoguera por decirlo, todo se mueve.
—Dudo de tu aseveración, compañero, ya que desde haca rato que tenemos las mismas estrellas frente a nosotros.
—Se mueven, pero nosotros también nos movemos, por lo que nuestros movimientos se anulan mutuamente creando la ilusión de que nos encontramos siempre en el mismo sitio.
—¿Tienes otro ejemplo para que comprenda mejor lo que planteas?
—Podemos ver el sol nacer por el este y ocultarse por el oeste y creer que es éste quien gira en torno a nosotros, cuando es al revés. Nosotros giramos en torno al sol, que a su vez gira en torno al centro de la galaxia que, también, gira en torno al centro del universo.
—Es decir, que todo gira en torno a nosotros.
—¿Por qué dices eso? —preguntó el ketchup de octubre.
—Porque somos la única inteligencia que conocemos en el universo, y es por demás obvio que existimos para ser su centro. Somos los elegidos.
—Ah —exclamo el aderezo de un revolucionario octubre caducado—, eso…

6 comentarios:

José A. García dijo...

Y si ellos se creen tan importantes como para ser el centro del universo, ¿por qué no habríamos de pensar los hombres (y las mujeres) del mismo modo?

Saludos,

J.

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Suele pasar que quien plantea un pensamiento innovador a veces caiga en un error de la epoca. A si que a no burlarse de los sobres caducos.

Geraldine, dijo...

quien les quita el placer de sentirse únicos y centro de todo...

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

¿Que te parecería formar parte de la convocatoria de relatos jueveros?
Vos escribis bien. Si te interesa, acá está el tema de esta semana.

http://julianoelapostata56.wordpress.com/2013/06/23/este-jueves-el-candidato-la-candidata/

Geraldine, dijo...

A usted lo nombraron en un post de "algún" blog...

Javier dijo...

Muy buena idea.